Declaración escrita del CDH43: Pena de muerte en Bahrein

Antes de la 43 sesión del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Americans for Democracy & Human Rights in Bahrein (ADHRB) desea aprovechar la oportunidad de la 43 sesión del Consejo de Derechos Humanos (CDH) de las Naciones Unidas (ONU) para plantear preocupaciones sobre el uso de la pena de muerte por parte de Bahrein, en particular, las ejecuciones de dos bahreiníes en julio de 2019 que tuvieron lugar a pesar de la fuerte oposición internacional, incluida la de miembros del Congreso de los Estados Unidos, miembros del Parlamento Europeo y del Parlamento francés, y el Relator Especial de la ONU sobre ejecuciones[1]. Las recientes ejecuciones  han exacerbado la preocupación de que Bahrein pueda continuar aplicando la pena capital en otros casos. Actualmente, hay ocho personas detenidas en las cárceles de Bahrein que corren un riesgo inminente de ejecución [2]. Continúa leyendo debajo el texto completo de la Declaración o pincha aquí para ver el documento  PDF.

El Fin de la Moratoria De Facto

En enero de 2017, el Reino de Bahrein ejecutó a tres hombres bahreiníes: Ali Al-Singace, de 21 años, Abbas Al-Samea, de 27 años, y Sami Mushaima, de 42 años, rompiendo su moratoria de facto de siete años sobre la pena de muerte. Al-Singace, Al-Samea y Mushaima son los tres primeros bahreiníes ejecutados desde marzo de 1996. El Tribunal de Casación confirmó a su vez las condenas a cadena perpetua contra otros siete hombres. Los diez fueron arrestados casi tres años antes, en 2014, por  haber causado supuestamente la muerte de tres policías. Todos fueron condenados en un juicio injusto en 2015 que utilizó pruebas extraídas mediante la tortura. A pesar de esto, el Tribunal de Casación negó sus acusaciones de tortura y afirmó que no había pruebas de que los agentes de las fuerzas de seguridad hubieran torturado o coaccionado a los acusados.

Su ejecución contraviene una resolución de 2007 de la Asamblea General de la ONU, que pedía una moratoria de las ejecuciones que, en última instancia, conduciría a la abolición total de la pena de muerte. Bahrein estuvo entre los que votaron en 2018 para oponerse a la resolución de la ONU.[3]

La Ejecución de Ahmed Al-Malali y Ali Al-Arab 

 El 27 de Julio de 2019, el gobierno de Bahrein ejecutó a Ali Al-Arab, de 25 años y a su primo Ahmed Al-Malali, de 24 años.[4] Los dos primos se enfrentaban en primer lugar a cadena perpetua y después a pena de muerte por su presunta colaboración en un escape de presos en la prisión de Jau en 2017. También fueron condenados por delitos que incluían formar y unirse a un grupo terrorista. Ahmed Al-Malali, fue detenido anteriormente por participar en manifestaciones pacíficas y presuntamente poseer un arma de fuego. Ahmed fue despojado de su nacionalidad, juzgado y condenado a cadena perpetua in absentia a pesar de estar bajo custodia policial en aquel momento. Se le negó el permiso para reunirse con su abogado durante las audiencias, en las que el juez también denegó las solicitudes de los abogados defensores de presentar pruebas que podrían haber servido como defensa de Al-Malali.

Ali Al-Arab fue detenido injustamente en 2017 por funcionarios del Ministerio del Interior que no poseían una orden judicial. Durante el tiempo que estuvo en prisión, fue torturado y obligado a firmar una confesión con los ojos vendados. Ali mostraba signos evidentes de tortura física; era transportado en silla de ruedas como consecuencia de las heridas que le fueron infringidas por las palizas que recibió de los guardias de la prisión. Ali, como Ahmed, fue despojado de su nacionalidad bahreiní. Se le negó el acceso a su abogado defensor y a un juicio justo, procedimientos contrarios a muchas leyes internacionales.

Ali y Ahmed fueron condenados a muerte en un juicio masivo injusto el 31 de enero de 2018. En 2019, el Tribunal Superior de Apelaciones y el Tribunal de Casación de Bahrein confirmaron sus condenas a muerte. La ejecución de Ahmed y Ali fue ampliamente rechazada por la comunidad internacional, incluidos miembros del Parlamento italiano, del Parlamento francés como el senador francés Pierre Laurant, miembros del Parlamento suizo, el Parlamento español y el Parlamento Europeo, así como Organizaciones no gubernamentales internacionales. Sus ejecuciones fueron una violación del derecho internacional, incluida la violación de la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes y del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos.

Mohamed Ramadan y Husain Ali Moosa

Mohamed Ramadan, de 36 años, y Husain Ali Moosa, de 32 años, son dos ciudadanos de Bahrein que fueron condenados a muerte en 2014 por su presunta participación en el atentado con bomba de Al-Dair en febrero de ese año cuya explosión mató a un policía y a numerosos civiles. La Dirección de Investigaciones Criminales (CID) detuvo a Mohamed sin orden judicial cuando se encontraba trabajando. Mientras estaba bajo custodia, los agentes del CID torturaron a Ramadan y le obligaron a confesar la autoría de un atentado. Como a muchos otros, se le negó el acceso a su abogado defensor y tuvo un juicio injusto. Su sentencia fue llevada a la Corte de Apelaciones con el argumento de que fue falsamente acusado, víctima de tortura y coaccionado para confesar un crimen que no cometió. El Tribunal de Casación rechazó la apelación final de Mohamed y confirmó su sentencia de muerte.

Husain Ali Moosa también fue arrestado sin orden judicial en Samaheej en 2014. Los oficiales del CID que arrestaron a Husain también lo torturaron y le obligaron a confesar haber cometido el atentado de Al-Dair. Además fue obligado a confesar la participación de Mohamed en el mismo atentado. Tras la extracción de la confesión por agentes del CID, lo trasladaron al Ministerio Público donde retiró sus confesiones. Al enterarse de que había retirado su confesión, los agentes del CID lo volvieron a poner bajo custodia y continuaron torturándolo durante los siguientes tres meses. A él también se le negó asistencia letrada y fue juzgado en una audiencia injusta.

Las acciones del gobierno de Bahrein contra los dos hombres violaron múltiples leyes internacionales, incluidas, entre otras, la Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos y Degradantes, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Derechos sociales y culturales.

Otros hombres en Riesgo de Ejecución

Otros hombres también corren peligro de ejecución. El 6 de junio de 2017, el cuarto Tribunal Penal Superior del reino dictó condenas a muerte contra Sayed Ahmed al-Abbar y Husain Ali Mohamed. Ambos hombres fueron torturados para que firmaran confesiones preparadas y actualmente corren riesgo de ejecución inminente. Salman Isa Ali Salman y Husain Ebrahim Ali Husain Marzooq también corren un riesgo inminente de ejecución. Además, seis de los hombres condenados a muerte en 2017 fueron condenados en el primer juicio militar para civiles tras la enmienda de abril de 2017 que eliminaba la prohibición constitucional de la práctica.[5] Sus condenas fueron conmutadas tardíamente por cadenas perpetuas.

El 29 de enero de 2018, el Tribunal de Casación de Bahrein confirmó la sentencia de muerte impuesta a Maher Abbas al-Khabbaz. Fue torturado bajo custodia hasta que proporcionó una confesión. Husain Abdulla Marhoon Rashid y Moosa Abdulla Moosa Jaafar, torturados para conseguir una confesión, vieron sus sentencias confirmadas por el Tribunal de Apelación el 20 de mayo y el 3 de junio de 2019, respectivamente, y corren un riesgo inminente de ejecución.

Conclusiones y recomendaciones

En casi todos los pasos de los casos de Ali Al-Singace, Abbas Al-Samea, Sami Mushaima, Ali Al-Arab, Ahmed Al-Malali, Mohamed Ramadan, Husain Ali Moosa y muchos otros, el gobierno de Bahrein violó sus derechos. Los hombres fueron arrestados sin orden judicial, torturados, obligados a confesar sus crímenes y condenados a muerte en juicios injustos empañados por violaciones al debido proceso. La aplicación de la pena de muerte contra ellos también contraviene numerosas normas internacionales de derechos humanos.

ADHRB pide al Gobierno de Bahrein: 

  • Antes de las ejecuciones en enero de 2017, el reino no había ejecutado a nadie durante varios años, observando una moratoria de facto. El gobierno de Bahrein debería restablecer su moratoria sobre la pena de muerte, con miras a su abolición definitiva.
  • El gobierno de Bahrein ha conmutado las condenas a muerte de varias personas por cadena perpetua. Debe conmutar todas las condenas a la pena capital con todas las personas condenadas a muerte, con especial atención a las personas cuyos juicios se vieron empañados por violaciones del debido proceso y denuncias de tortura, y garantizar que los casos se vuelvan a juzgar de conformidad con las normas establecidas por el derecho internacional.
  • El gobierno debe iniciar una investigación sobre los casos de personas condenadas a muerte que alegan violaciones del debido proceso y tortura en su juicio y detención, y enjuiciar a todos los funcionarios que hayan torturado o maltratado a los reclusos.
  • Garantizar que todos los juicios futuros sean compatibles con el derecho a un juicio justo y a un juicio independiente.

                                   

[1] «ADHRB condena enérgicamente la ejecución injusta de Ali AlArab y Ahmed AlMalali por Bahrein», ADHRB, 29 de julio de 2019, www.adhrb.org/2019/07/adhrb-strongly-condemns-bahrains-unjust-execution-of-ali-alarab-and-ahmed-almalali/.

[2] Kenneth Roth, “Informe mundial 2020: Tendencias de los derechos en Bahrein”, Human Rights Watch, 14 de enero de 2020,www.hrw.org/world-report/2020/country-chapters/bahrain.

[3] “La abolición global de la pena de muerte un paso más cerca”, Amnistía Internacional, 17 de diciembre de 2018 www.amnesty.org/en/latest/news/2018/12/global-abolition-closer-than-ever-as-record-number-of-countries-vote-to-end-executions/.

[4]Perfiles en persecución: Mohamed Ramadan y Husain Ali Moosa ”, ADHRB, 26 de noviembre de 2019, www.adhrb.org/2018/02/profiles-in-persecution-mohamed-ramadan-husain-ali-moosa/.

[5] «El tribunal militar de Bahrein condena a muerte a seis convictos por cargos de terrorismo», Reuters, 25 de diciembre de 2017,https://www.reuters.com/article/us-bahrain-security/bahraini-military-court-convicts-six-to-death-on-terror-charges-idUSKBN1EJ0L7.